La expulsión traumática
Desde la eternidad, nuestro diseño era perfecto. Fuimos creados a imagen y semejanza de Dios, con su Espíritu en nuestro espíritu. Nuestra alma estaba llena de la luz de la vida, nuestro cuerpo era perfecto, sin ningún nivel de corrupción ni enfermedad. Todo en nosotros era uno, sin división, en integridad; de la misma forma [...]